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La razón de esta acción especial fue la muerte del perro de las dos chicas. Los hermanos absolutamente querían un nuevo amigo de cuatro patas. El padre ahora prometió comprarles un perro, pero con la condición de que las chicas inicien una llamada en Facebook y obtengan un millón de Me gusta. No hay problema para las chicas inteligentes. Solo pasaron unas horas antes de que se alcanzara la meta, para sorprender al padre.
Facebook como experimento
El padre, Ryan Cordell, está investigando la distribución viral en la Northeastern University en Boston. De aquí proviene la tarea especial de recopilar los "me gusta" en Facebook, en parte por interés científico. Sin embargo, se puede suponer que los hermanos habrían tenido al nuevo cachorro de esa manera.